Sahih Al-Kalim At-Taiyib
15.- Suplicaciones en tiempos de preocupación y tristeza
100.- El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) acostumbraba decir lo siguiente en tiempos de preocupación: “No hay Dios sino Alláh, el Más Grande, el Altísimo, el Omnipotente. No hay Dios sino Alláh, el Señor del Gran Trono. No hay Dios sino Alláh, el Señor de los Cielos, la Tierra y el Gran Trono.
101.- Es reportado que el Profeta (صلى الله عليه وسلم) que cuando encaraba con dificultad, él acostumbraba decir: “¡Oh Alláh! Tú eres el Vivo. Tú eres el Sustentador. Con Tu Misericordia yo busco refugio”.
102.- Es reportado por Abu Bakr (رضي الله عنه) que el Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) dijo: “La oración de una persona preocupada debería ser (como sigue): “¡Oh Alláh! Yo busco Tu Misericordia. (Por favor) no me dejes sin Tu Misericordia, aún por la ceguera de un ojo. ¡Oh Alláh! (Por favor) mejora todos mis asuntos. No hay Dios sino Tú”.
103.- El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) dijo a Asma bint (hija) de Omais (رضي الله عنها): “¿Debería yo enseñarte una suplicación que puedas decir en tiempos de dificultad?” (Di:) “¡Oh Alláh! ¡Oh Alláh! Tú eres Mi Señor. Yo no tomo compañero o asociado Contigo”.
104.- El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) dijo: “Thin Nus (Jonás el profeta (صلى الله عليه وسلم)) pronunció esta oración mientras estaba en el vientre de la ballena: “(¡Oh Alláh!) No hay dios sino Tú. Sea la Gloria para Ti. Verdaderamente yo estaba entre los malhechores”. Las oraciones de cualquier persona quien usa esta suplicación para cualquier asunto (e invoca a Alláh, el Altísimo) será satisfecho”.
105.- Es reportado que el Profeta de Alláh (صلى الله عليه وسلم) dijo: “Cualquier esclavo sirviente de Alláh, el Altísimo, quien sea tocado con preocupaciones o tristezas y reza: “¡Oh Alláh! Yo soy Tu esclavo, el hijo de Tu esclavo sirviente, el hijo de Tu esclava sirviente. Mi frente está en Tu mano (Tú me controlas). Tu juicio pasará hasta mí. Tu sentencia hasta mí es justa y equitativa. ¡Oh Alláh! Te pido con cada nombre (atributo) con el que Tú mismo Te has llamado, con el Libro que Has enviado y enseñado a Tus esclavos sirvientes, y cualquier cosa que Tú has guardado oculta en lo no Visto para Tu Propio Conocimiento. ¡Oh Alláh! (Por favor) haz del Sagrado Corán la primavera de mi corazón, la luz para mi pecho, el removedor de mi tristeza y la abolición de mis preocupaciones”, Alláh, El Altísimo removerá la tristeza y preocupaciones de esa persona reemplazándolas con facilidad y comodidad”.
Sheihk Abdelazziz ibn Baz
Respuesta a unas preguntas sobre la Creencia
De ‘Abd Al-‘Aziz ibn ‘Abdullah ibn Baz al respetable hermano el Dr. D.M., que Allah le proteja. La paz, la misericordia y las bendiciones de Allah sean con usted:
Con referencia a su carta en la que me pide explicar las siguientes aleyas nobles: En el nombre de Allah, el Clemente y el Misericordioso: Él es Allah en los cielos y en la tierra, conoce vuestro secreto y vuestra manifestación y sabe lo que adquirís Y la aleya: El escabel de Su trono abarca los cielos y la tierra y no Le causa fatiga mantenerlos. Él es el Elevado, el Inmenso Y la aleya: Él es Quien es Dios en el cielo y es Dios en la tierra y es el Sabio, el Conocedor Y la aleya: No hay confidencia de tres en la que Él no sea el cuarto, o de cinco en la que Él no sea el sexto, ni de menos o más que eso sin que Él no esté con ellos dondequiera que estén. Luego el Día del Levantamiento les hará saber lo que hicieron. Es cierto que Allah es Conocedor de todas las cosas
Leer más:Respuesta a unas preguntas sobre la Creencia
Sahih Al-Kalim At-Taiyib
16.- Suplicaciones cuando se encuentre a un enemigo y gente en la autoridad
106.-
El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) acostumbraba decir si él temía a un grupo de gente (malvada): “¡Oh Alláh! Nosotros Te ponemos en frente de esta (gente). Nosotros buscamos refugio Contigo de su maldad”.
107.- Es reportado que el Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) cada vez que estaba en contacto con un enemigo acostumbraba decir: “¡Oh Alláh! Tú eres mi Ayudador. Tú eres mi Apoyador. (¡Oh Alláh!) Contigo yo me muevo. Contigo (yo tengo el poder para) pelear”.
108.- Abdullah Ibn Abas (رضي الله عنه) dijo: “Para nosotros, Alláh es suficiente. Él es el Que Mejor dispone de nuestros asuntos” (Sagrado Corán 3:173). Esta es la oración que Ibrahim, el Profeta (صلى الله عليه وسلم) pronunció cuando fue arrojado al fuego. Es la misma oración que Muhammad, el Profeta (صلى الله عليه وسلم) también pronunció cuando: “Los hombres les dijeron: “Un gran ejército está reuniéndose contra ustedes” (Sagrado Corán 3:173).
16.- Suplicaciones cuando se encuentre a un enemigo y gente en la autoridad
106.- El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) acostumbraba decir si él temía a un grupo de gente (malvada): “¡Oh Alláh! Nosotros Te ponemos en frente de esta (gente). Nosotros buscamos refugio Contigo de su maldad”.
107.- Es reportado que el Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) cada vez que estaba en contacto con un enemigo acostumbraba decir: “¡Oh Alláh! Tú eres mi Ayudador. Tú eres mi Apoyador. (¡Oh Alláh!) Contigo yo me muevo. Contigo (yo tengo el poder para) pelear”.
108.- Abdullah Ibn Abas (رضي الله عنه) dijo: “Para nosotros, Alláh es suficiente. Él es el Que Mejor dispone de nuestros asuntos” (Sagrado Corán 3:173). Esta es la oración que Ibrahim, el Profeta (صلى الله عليه وسلم) pronunció cuando fue arrojado al fuego. Es la misma oración que Muhammad, el Profeta (صلى الله عليه وسلم) también pronunció cuando: “Los hombres les dijeron: “Un gran ejército está reuniéndose contra ustedes” (Sagrado Corán 3:173).
Sahih Al-Kalim At-Taiyib
13.- Suplicación durante la oración (después del Tasha-hud durante el sentado final)
84.- El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) dijo: “Al terminar el sentado final (durante la oración), uno debería buscar refugio con Alláh, el Altísimo de cuatro cosas: la tortura de la tumba, la tortura del fuego del Infierno, las pruebas de la vida y de la muerte y el mal causado por el Falso Mesías”.
85.- Es reportado por Aisha (رضي الله عنها) que El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) ofreció las siguientes suplicaciones durante la oración: “¡Oh Alláh! Yo busco refugio Contigo de la tortura de la tumba. Yo busco refugio Contigo de la prueba del Falso Mesías. Yo busco refugio Contigo de las tentaciones de la vida y de la muerte. ¡Oh Alláh! O busco refugio Contigo de mis pecados y de estar en deuda”. Un hombre dijo: “¡Oh Mensajero de Alláh Yo te escuché repitiendo ésta última porción de tu suplicación (¿Cuál es el significado de ello?)”. Él (صلى الله عليه وسلم) dijo: “Uno quien está en deuda mentirá cuando hable y siempre rompe sus promesas”.
Leer más:13.- Suplicación durante la oración
Sahih Al-Kalim At-Taiyib
7.- La virtud de las oraciones nocturnas
Alláh, el Altísimo declaró en el Sagrado Corán, Surat al-Muzzamil (73:1-4): “¡Oh tú, envuelto en mantos! Levántate a rezar por las noches, pero no toda la noche, la mitad o un poco menos o un poco más; y recita el Corán en tonos rítmicos mesurados”.
42.- Es reportado que el Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) dijo: “Alláh, Nuestro Señor, desciende (Él mismo) a los cielos de este universo hacia el último tercio de la noche y anuncia: “A cualquiera que le gustara llamarme puede hacerlo que Yo le responderé (cumplir su oración). A cualquiera que le gustara pedir de Mí puede hacerlo, tal que Yo pueda garantizar su respuesta. Quienquiera que gustara buscar Mi perdón puede hacerlo que Yo lo indultaré (y perdonaré sus pecados)”.
43.- El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) dijo: “Lo más cerca que uno puede estar de Alláh, el Altísimo es durante la tercera (o última) porción de la noche. Si uno puede pronunciar remembranza de Alláh, el Altísimo en este tiempo, que lo haga”.
44.- El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) dijo: “Verdaderamente hay una hora durante la noche (entera) cuando cualquier musulmán (sometido a la Voluntad de Alláh, el Altísimo) puede llamar a Alláh, el Altísimo y solicitar cualquier cosa de Él, sin tener cuidado de si el asunto es mundano o del más allá. Diligentemente Alláh, el Altísimo garantizará y cumplirá la solicitud. Este es el caso cada noche”.
45.- El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) dijo: “Uno debería declarar y anunciar la siguiente declaración al abandonar el lugar de uno (lugar de morada): “En el nombre de Alláh. Yo creo en Alláh y dependo de Él. No hay fuerza más grande ni poder sino con Alláh, el Altísimo”. Una voz responderá entonces a la persona diciendo: ”Tú has sido suficientemente protegido y guiado”. Satán se alejará diciendo: “¿Qué puedes a una persona quien es guiada y protegida?”.
46.- Um Salamah (رضي الله عنها) dijo: “El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) nunca dejó mi hogar sin levantar los ojos al cielo diciendo: “¡Oh Alláh! Yo busco refugio Contigo de ser desviado o de desviar a otros, caer (en las trampas dejadas por Satán) o causa que otros caigan, dañarme a mí mismo o dañar a otros, sufrir de la ignorancia, o permitir a otros sufrir de la ignorancia”.
De las excelencias del buen trato
Los Jardines de los Justos. Imam Nawawi.
Capítulo XLII
(Hacia los amigos del padre, la madre, parientes, esposa y otros que merezcan ser honrados)
Sagrado Corán
Hadiz:
1. 346.
De Ibn Umar, Allah esté complacido de los dos, que dijo el Profeta, Allah le bendiga y le de paz:
"La más hermosa de las acciones es la que hace el hombre con quien quiso a su padre."
Y de Abdullah Ibn Dinar que Abdullah Ibn Umar, Allah esté complacido de los dos, se encontró con un campesino en el camino hacia Meca. Abdullah Ibn Umar lo saludó y le dió el burro que montaba y su turbante.
Dijo Ibn Dinar: ‘Y le dijimos nosotros: ¡Que Allah te bendiga! Ellos son campesinos y se conforman con poco y tú le diste mucho.’
Dijo Abdullah Ibn Umar: ‘El padre de este hombre era amigo de Umar Ibn Al Jattáb (su padre), Allah esté complacido de él.
Y yo he oído decir al Mensajero de Allah, Él le bendiga y le de paz: ‘La más virtuosa de las acciones es aquella que hace un hombre con aquel que era amigo de su padre’."
Lo relató Muslim.
2. 347.
De Abu Usaid Malik Ibn Rabia, Allah esté complacido con él, que dijo:
"Mientras estábamos sentados con el Mensajero de Allah, Él le bendiga y le de paz, vino un hombre de Bani Sálama y le preguntó: ‘¡Oh Mensajero de Allah! ¿Hay alguna buena acción que yo pueda hacer por mis padres después de su muerte?’
Dijo: ‘¡Sí! Pedir por ellos. Y especialmente pedir a Allah el perdón para ellos. Ejecutar sus consejos y últimos deseos. Y tener buenas relaciones con sus familiares y honrar a sus amigos’."
Lo relató Abu Daud.
3. 348.
De Aisha, Allah esté complacido de ella, que dijo:
"No he sido tan celosa de las mujeres del Profeta, Allah le bendiga y le de paz, como lo he sido de Jadiya, Allah esté complacido de ella. Yo no la llegué a conocer,[1] pero él solía recordarla a menudo.
A veces sacrificaba una cabra, troceaba sus miembros y los enviaba a las amigas de Jadiya.
Y si yo le decía: ‘¡Como si no hubiese en este mundo otra mujer más que Jadiya!’
El decía elogiándola: ‘Verdaderamente ella era tal y tal. Y tuve hijos suyos’."
Lo relataron Al Bujari y Muslim.
4. 349.
De Anas Ibn Malik, Allah esté complacido con él, que dijo:
"Salí de viaje con Yarir Ibn Abdillah al Bayali, Allah esté complacido gon él, y se dispuso a servirme solícitamente. Y le dije (dada su edad y dignidad): ‘¡No hagas eso!’
Y él me dijo: ‘Yo he visto a los auxiliares de Medina hacer grandes cosas con el Mensajero de Allah, Él le bendiga y le de paz. Y me he jurado a mí mismo no acompañar a ninguno de ellos sin servirlo debidamente’."
Lo relataron Al Bujari y Muslim.
Notas del Capítulo XLII
[1] Porque Jadiya murió antes de que se casara Aisha.