Sahih Al Bujari
Libro de la Fé
I• Las palabras del Profeta (B y P): «El Islam fue edificado sobre cinco»
8. Ibn ‘Umar relató que el Mensajero de Dios (B y P) dijo: «El Islam fue edificado sobre cinco cosas:
• Testificar que: No hay más Dios sino Dios y que Muhammad es el Mensajero de Dios (Ash Sh- aháda),
•La práctica de la oración prescrita (As Salât) ,
• El pago del zakat (Az Zakât) , • La peregrinación (Al-Haÿÿ), • La practica del ayuno del mes de Ramadán
(As Siyâm)». Sobre los aspectos de la fe
II • 9. Abû Huraira relató que el Mensajero deDios (B y P) dijo: «La fe consiste en más de sesen- ta aspectos y al hayâ es uno de estos aspectos».
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Sahih Al-Kalim At-Taiyib
19.- Aceptar la predestinación de un hombre sin negligencia o exageración.
Alláh el Altísimo, declaró en el Sagrado Corán 3:156: ¡Oh ustedes quienes creen! No sean como los incrédulos quienes dicen a su respiro cuando ellos están viajando por la tierra o están ocupados en pelear: “Si ellos se hubieran quedado con nosotros; ellos no hubieran muerto, ni hubieran sido matados”. Esto es así que Alláh, el Altísimo puede hacerlo una causa de dolor en sus corazones. Es Alláh, el Altísimo, el que da la vida y la muerte; y Alláh, el Altísimo que ve todo lo que ustedes hacen.
115.- El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) dijo: “Un El creyente fuerte es mejor y más amado ante Alláh, el Altísimo, que (un) (creyente) débil. Cada uno de ellos, de cualquier forma es bendecido con bondad (por sí mismo). Uno debería observar qué beneficios uno debe. Uno debería buscar el refugio de Alláh, el Altísimo. Uno no debería pensar en la incapacidad de uno mismo (para hacer algo). Si uno es probado con dificultades, uno no debería decir: “Si lo hubiera hecho de forma diferente, si hubiera llevado a cabo algo más o con mejor”. Sino más bien, uno debe decir: “Cualquier cosa que Alláh, el Altísimo ha predestinado me sucederá”. “Si” abre la (puerta) para un acto malvado”.
Sahih Al-Kalim At-Taiyib
12.- Suplicaciones durante la oración (en rukú (inclinación), postración y asiento entre postraciones)
70.- Fue reportado por Huthaifa (رضي الله عنه) que el Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) fue escuchado decir, durante su rukú (inclinación en la oración): “Subhana Rabia al-Athim” (Glorificado sea Mi Señor, el Más Grande), tres veces. Y cuando él (صلى الله عليه وسلم) se postraba decía tres veces: “Subhana Rabia Al-Ala” (Glorificado sea Mi Señor, el Más Alto).
71.- Ali (رضي الله عنه) reportó una descripción del Apóstol de Alláh en la oración: “Mientras estaba en Rukú, él (صلى الله عليه وسلم) decía: “¡Oh Alláh! A Ti yo te reverencio. En Ti yo creo. A Ti me rindo. ¡Oh Alláh! Mi oído es debido a Ti, (tanto como es) mi vista, mi cerebro, mis huesos y mis nervios”. Después de levantarse del Rukú, él (صلى الله عليه وسلم) continuaba: “Alláh escucha a aquellos quienes lo alaban a Él. ¡Oh Nuestro Señor! A Ti es debida toda la alabanza, tanta como para que llene los cielos, la tierra, la distancia entre cualquier cosa más que Tú quieras y desees”. Al postrarse, él decía: “¡Oh Alláh! A Ti yo me postro. En Ti yo creo. A Ti yo me rindo. Mi cara se postra ante Ti, quien la creó; le dio forma y abrió su oído y su vista. Bendito sea Él, el mejor de los Creadores”.
72.- Aisha (رضي الله عنها) dijo: “El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) siempre decía durante el Rukú y la postración: “¡Glorificado seas Tú, Nuestro Señor! Toda la alabanza es debida a Ti. ¡Oh Alláh! Discúlpame y perdóname”, en un intento de usar el significado del verso coránico: “Elabora la alabanza de Tu Señor y busca el perdón. Verdaderamente él es el Perdonador” (71:10).
Leer más:12.- Suplicaciones durante la oración
De las excelencias del buen trato
Los Jardines de los Justos. Imam Nawawi.
Capítulo XLII
(Hacia los amigos del padre, la madre, parientes, esposa y otros que merezcan ser honrados)
Sagrado Corán
Hadiz:
1. 346.
De Ibn Umar, Allah esté complacido de los dos, que dijo el Profeta, Allah le bendiga y le de paz:
"La más hermosa de las acciones es la que hace el hombre con quien quiso a su padre."
Y de Abdullah Ibn Dinar que Abdullah Ibn Umar, Allah esté complacido de los dos, se encontró con un campesino en el camino hacia Meca. Abdullah Ibn Umar lo saludó y le dió el burro que montaba y su turbante.
Dijo Ibn Dinar: ‘Y le dijimos nosotros: ¡Que Allah te bendiga! Ellos son campesinos y se conforman con poco y tú le diste mucho.’
Dijo Abdullah Ibn Umar: ‘El padre de este hombre era amigo de Umar Ibn Al Jattáb (su padre), Allah esté complacido de él.
Y yo he oído decir al Mensajero de Allah, Él le bendiga y le de paz: ‘La más virtuosa de las acciones es aquella que hace un hombre con aquel que era amigo de su padre’."
Lo relató Muslim.
2. 347.
De Abu Usaid Malik Ibn Rabia, Allah esté complacido con él, que dijo:
"Mientras estábamos sentados con el Mensajero de Allah, Él le bendiga y le de paz, vino un hombre de Bani Sálama y le preguntó: ‘¡Oh Mensajero de Allah! ¿Hay alguna buena acción que yo pueda hacer por mis padres después de su muerte?’
Dijo: ‘¡Sí! Pedir por ellos. Y especialmente pedir a Allah el perdón para ellos. Ejecutar sus consejos y últimos deseos. Y tener buenas relaciones con sus familiares y honrar a sus amigos’."
Lo relató Abu Daud.
3. 348.
De Aisha, Allah esté complacido de ella, que dijo:
"No he sido tan celosa de las mujeres del Profeta, Allah le bendiga y le de paz, como lo he sido de Jadiya, Allah esté complacido de ella. Yo no la llegué a conocer,[1] pero él solía recordarla a menudo.
A veces sacrificaba una cabra, troceaba sus miembros y los enviaba a las amigas de Jadiya.
Y si yo le decía: ‘¡Como si no hubiese en este mundo otra mujer más que Jadiya!’
El decía elogiándola: ‘Verdaderamente ella era tal y tal. Y tuve hijos suyos’."
Lo relataron Al Bujari y Muslim.
4. 349.
De Anas Ibn Malik, Allah esté complacido con él, que dijo:
"Salí de viaje con Yarir Ibn Abdillah al Bayali, Allah esté complacido gon él, y se dispuso a servirme solícitamente. Y le dije (dada su edad y dignidad): ‘¡No hagas eso!’
Y él me dijo: ‘Yo he visto a los auxiliares de Medina hacer grandes cosas con el Mensajero de Allah, Él le bendiga y le de paz. Y me he jurado a mí mismo no acompañar a ninguno de ellos sin servirlo debidamente’."
Lo relataron Al Bujari y Muslim.
Notas del Capítulo XLII
[1] Porque Jadiya murió antes de que se casara Aisha.
Sheik Salih Al-Fawzan.
La mayoría no es una prueba de que algo es correcto
Fuente: Sharh Masail-ul-Jahiliyah (páginas 60-62).
Traduccion al español: Musa Abdullah Reyes H..
El Imám Muhammad bin Abdul-Wahab (rahimahullah) dijo:
De los más grandes de sus principios estaban que ellos serían engañados por la mayoría, acostumbrando eso para determinar lo correcto de un asunto. Ellos también determinarían la falsedad de algo si era extraño y que sus adherentes eran pocos. Así que Alláh les trajo lo opuesto, clarificando esto en muchos lugares del Corán”.
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Sahih Al-Kalim At-Taiyib
16.- Suplicaciones cuando se encuentre a un enemigo y gente en la autoridad
106.-
El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) acostumbraba decir si él temía a un grupo de gente (malvada): “¡Oh Alláh! Nosotros Te ponemos en frente de esta (gente). Nosotros buscamos refugio Contigo de su maldad”.
107.- Es reportado que el Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) cada vez que estaba en contacto con un enemigo acostumbraba decir: “¡Oh Alláh! Tú eres mi Ayudador. Tú eres mi Apoyador. (¡Oh Alláh!) Contigo yo me muevo. Contigo (yo tengo el poder para) pelear”.
108.- Abdullah Ibn Abas (رضي الله عنه) dijo: “Para nosotros, Alláh es suficiente. Él es el Que Mejor dispone de nuestros asuntos” (Sagrado Corán 3:173). Esta es la oración que Ibrahim, el Profeta (صلى الله عليه وسلم) pronunció cuando fue arrojado al fuego. Es la misma oración que Muhammad, el Profeta (صلى الله عليه وسلم) también pronunció cuando: “Los hombres les dijeron: “Un gran ejército está reuniéndose contra ustedes” (Sagrado Corán 3:173).
16.- Suplicaciones cuando se encuentre a un enemigo y gente en la autoridad
106.- El Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) acostumbraba decir si él temía a un grupo de gente (malvada): “¡Oh Alláh! Nosotros Te ponemos en frente de esta (gente). Nosotros buscamos refugio Contigo de su maldad”.
107.- Es reportado que el Apóstol de Alláh (صلى الله عليه وسلم) cada vez que estaba en contacto con un enemigo acostumbraba decir: “¡Oh Alláh! Tú eres mi Ayudador. Tú eres mi Apoyador. (¡Oh Alláh!) Contigo yo me muevo. Contigo (yo tengo el poder para) pelear”.
108.- Abdullah Ibn Abas (رضي الله عنه) dijo: “Para nosotros, Alláh es suficiente. Él es el Que Mejor dispone de nuestros asuntos” (Sagrado Corán 3:173). Esta es la oración que Ibrahim, el Profeta (صلى الله عليه وسلم) pronunció cuando fue arrojado al fuego. Es la misma oración que Muhammad, el Profeta (صلى الله عليه وسلم) también pronunció cuando: “Los hombres les dijeron: “Un gran ejército está reuniéndose contra ustedes” (Sagrado Corán 3:173).